Este documento esta dedicado a todos los niños y niñas violados y utilizados para fines económicos por la miseria humana, desde sacerdotes, padres, tíos, hermanos, primos y vecinos son por lo general los individuos de tales actos, solo visto en los seres humanos. Mi compromiso con la humanidad, es procurar el éxito a mediano plazo para alcanzar el cero miseria, al menos en Venezuela, contagiando Latinoamérica, África y Asia donde las estadísticas producen mayor dolor.