Vivimos en un mundo acelerado, agitado y con una sobredosis de información y estimulación. A veces podemos vernos absorbidos por la vorágine, dedicando gran parte de nuestro tiempo al trabajo o al estudio, y con el tiempo libre que resta, en ocasiones decidimos distendernos en actividades sedentarias. Así como una planta para crecer necesita agua, luz solar, tierra fértil y un clima adecuado, así también nuestra vida se nutre de distintas áreas , entre ellas la actividad física es la que mejora nuestras funciones vitales. La clave es saber administrar el tiempo. Es cierto que han proliferado las marcas que ofrecen productos para la práctica del deporte, y también es un claro ejemplo de consumismo en el presente. Este consumo de bienes y servicios deportivos está vinculado a la figura corporal y la salud. Ahora el hacer deporte implica moverse en espacios públicos, y es por ello las principales marcas deportivas se esmeran en defender las consecuencias saludables que conllevan una vida asociada a la práctica del deporte regular. Este libro cumple esa función, su autor a través de su fácil lectura, persigue objetivos únicamente de auto análisis, que permita sopesar aspectos relacionados con una vida plena a través del ejercicio del deporte.