Los canales del sur de Chile tranquilos a ratos; tormentosos, intrincados y fantasmagóricos todo el tiempo, hasta el siglo XVI sólo conocían la presencia humana de los indios alacalufes que en inestables y débiles canoas los merodeaban. En el mes de octubre de 1557 aparecen desde el Golfo de Penas avanzando hacia el sur dos bien pertrechados bergantines españoles en procura de encontrar la boca nor-occidental del Estrecho de Magallanes. Una de estas embarcaciones es el San Luis que lleva como capitán al ilustre marino español Juan Ladrilleros. Piloto formado en una escuela de élite como fue la de Sevilla, dependiente de la poderosa Casa de Contratación. Enviado por el gobernador García Hurtado de Mendoza, tiene como mandato llegar hasta el Estrecho y tomar posesión de este paso en nombre del Virreinato del Perú y la Gobernación de Chile. La lectura de este documentado histórico, le permitirá al lector conocer las motivaciones de Ladrilleros para navegar en una misión por los mares más inhóspitos de la tierra. Su autor, residente y conocedor de esos mares, nos entrega las vivencias y sensaciones de una sorprendente navegación.