La colosal tarea de unificar a la nación en una sola historia, una sola raza, una sola lengua y un solo Dios, en medio de un territorio de suelos, climas y poblaciones tan diversas, no podía arrojar otro resultado que el de una nación fragmentada en donde el sentimiento de incomprensión y el deseo de marginalización del ‘otro’ terminaron por definir,lamentablemente, a la Colombia contemporánea. Sin embargo, Eduardo Zuleta Gaviria, escritor antioqueño, nacido en el pequeño pueblo de Remedios, publica en 1897 Tierra Virgen, una novela atravesada por giros históricos y políticos donde la raza es un elemento que se escribe y se reescribe, poniendo en crisis todos sus presupuestos.